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11 de julio de 2019

Lo que arriegué por ti - Marisa Sicilia

CRÓNICA DE UNA DESPEDIDA

Hace mucho que esta casa virtual, mi casa, dejó de ser solo un blog de reseñas para convertirse en un diario de lecturas y, como diría mi querida Miss Brandon, de vida.
Aquí voy dejando trocitos de experiencias lectoras, fragmentos de libros y poesía y, a veces, también hablo de las cosas que me importan y sobre las que me gusta posicionarme.
Y luego hay días como los de hoy, en los que quiero convertir el blog en un tarrito de esencias, el sitio donde encerrar emociones y recuerdos y que puedo destapar cuando quiera, con la seguridad de que todo eso permanecerá intacto. La banda sonora la ponen Imagine Dragons y su tema Whatever it takes.

A los lectores suele pasarnos aquello de engancharnos irremediablemente a una historia de ficción y convertirla en realidad. Dar vida a los protagonistas en nuestra mente, ponerles cara y gestos, llegar incluso a sentir como/con ellos. La facilidad con la que las emociones fluyen durante una lectura (o una película), el efecto deslumbrante que ciertos escritores transmiten a través de sus letras (metáforas imposibles, imágenes literarias cargadas de belleza), la asunción de un mensaje cómplice -cuando piensas yo también estaría de tu lado, yo también comparto este modo de entender la amistad, el amor, la vida...-. Con todas estas cosas contamos. A lo que no vamos a acostumbrarnos, yo al menos me niego a hacerlo, es a despedirme de ellos.

Imaginad que habéis visto nacer esa historia y habéis contado los meses hasta verla publicada en papel, que es algo así como el último paso para hacerles tangibles, corpóreos.  ¿Cómo te despides de esas personas que han formado de algún modo extraño pero real, parte de tu vida durante meses?
En realidad no puedes hacerlo, pero sí puedes celebrar que han existido e intentar que, aun sin quererla, esa despedida sea más dulce.


El día 5 de julio, Marisa Sicilia presentaba en Madrid Lo que arriesgué por ti y, hasta que llegó ese día, ambas nos empeñamos en que Antje y Dmitry tuvieran su momento de gloria. Un último capítulo. Un bonus track. 

Hay dos cosas que no voy a olvidar de ese día:

- El calor que nos transmitieron quienes asistieron, la sonrisa cómplice entre el público de la también escritora Laura Sanz que fue un bálsamo para mis nervios, y el pellizco que sientes por la ausencia de aquellas personas que por muy diversas razones no pudieron estar, pero que desde la distancia te envían fuerza para hacerlo aún mejor.

- Los mensajes que transmitió Marisa Sicilia -o que yo libremente interpreté- en relación a los protagonistas de la novela pero que se pueden aplicar a la vida: no olvidar el pasado (para no repetirlo), no aceptar como bueno aquello que nos paraliza o nos daña, asumir los errores sin que eso suponga lastrar nuestra vida y, sobre todo, no renunciar nunca a lo que amamos.



(Podéis pinchar aquí para ver la Crónica de la Presentación)

Lo que sé es que, en este mundo que tantas veces se me antoja hostil e injusto, es fundamental invertir el tiempo en todo aquello que nos llena, que nos alimenta y que nos hace felices. Y es aún más importante compartirlo con las personas que nos importan y cuya presencia nos hace, en cierta medida, sentir en casa. Me siento muy en deuda con todas esas personas, pero con Marisa -la escritora y la amiga- más que con ninguna otra. 

Me quedo con su dedicatoria inicial y su mensaje:  <<Para aquellas que os enfrentáis a diario a las inseguridades, las zancadillas, las desilusiones, la presión por llegar a todo. Gracias por no rendiros, por querer hacerlo aún mejor. Por arriesgaros. >>

Decía Marisa en su crónica que es importante dejar ir, despedirse, cerrar el círculo para que puedan llegar cosas nuevas. Mi suerte es que Nadina, Mathieu, Antje y Dmitry no se marchan del todo, seguirán ahí, en la estantería, esperando el momento justo para volver a ellos. Es lo que ocurre con las buenas historias, son puerto seguro en el que atracar siempre. No es un adiós, es un hasta la próxima lectura.





Whatever it takes
You take me to the top
I'm ready for whatever it takes
Because I love the adrenaline in my veins
I do what it takes



8 comentarios:

  1. Nunca sé qué decirte aparte de gracias y de que no dejo de celebrar ese "estar del mismo lado". Creo que no podría olvidar aunque quisiera y la verdad es que no quiero. Me gusta guardarlo todo, atesorar cada momento y propiciar otros nuevos, pero no sería ni la décima parte de especial si esa emoción no fuera compartida. Gracias por todas las que ya llevamos y, por supuesto, vamos a por más. We´re ready...

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    1. Lo hemos hablado muchas veces: ese estar en sintonía, compartir temas que nos preocupan o que nos enriquecen, esa celebración al encontrarte con alguien afín. Yo también guardo los pequeños y los grandes momentos, las charlas, los ánimos, los buenos consejos. Y, como tú, lo hago en un lugar donde siempre dejo espacio para que entren más.
      We´re ready.

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  2. A mí me dan mucha pena las despedidas. Mucha más de lo que podría confesar en voz alta. Por eso creo que me gustan tanto los libros; en cierta manera es un hasta luego, hasta la próxima vez que quieras volver porque yo seguiré en estas páginas.
    Pronto leeré el libro de Marisa, aunque ya sé que me va a gustar.

    Por cierto, te voy a robar las palabras porque encajan más en mi universo, mi blog no es un blog de reseñas (nunca lo ha sido, de hecho yo no escribo reseñas, sino simples opiniones), sino un diario de lecturas... Creo que encaja conmigo también.


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    1. Hola, Carmen
      Las despedidas siempre son difíciles, pero es cierto que los libros tienen ese maravilloso encanto: puedes retomarlos cuando quieras y, muchas veces, aún perdida la sorpresa, son capaces de emocionarte como en la primera lectura.
      Por lo que te he leído yo también diría que tu blog es un diario de lecturas, pero además siempre me parece ver un extra de cuidado y respeto, como en pocos blogs, lo que lo hace mucho más valioso.
      Ojalá disfrutes mucho con el libro de Marisa. ;)
      Un beso.

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  3. Hay historias que se quedan con nosotras para siempre, y unen a lector y escritor y eso no lo cambia nadie. Yo los llamo mis libros de "no retorno"
    Buen fin de semana para todas!!

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    1. Hola, Noemí
      Me encanta el concepto libros de "no retorno". Lo cierto es que si tienen el poder de hacer que un lector encuentre a "su escritor", ya es mucho. Diría que son los libros que consiguen que tengamos autor@s fetiche. Y suele ser una unión duradera en el tiempo :)
      Feliz semana.

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  4. Me sabe mal perderme estas reuniones, lástima vivir tan lejos, me emocionan tan solo tus palabras, no quiero ni pensar haber estado allí
    Como bien dicen hay historias que se quedan aunque ya sabes cual se quedará en mi corazón pasra siempre ♥
    Algún día!!!
    Un besote

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    1. Hola, Pepa
      No estás en nuestras reuniones (ni en presentaciones ni en las que no se ven por las redes) pero créeme cuando te digo que a veces te mencionamos y que muchas (lectoras y autoras incluidas) pensamos en lo enriquecedor que sería para todas si pudieras estar. En el caso de la presentación muchas veces me he encontrando pensado: "fíjate, esto le encantaría a Pepa o al menos lo debatiríamos con ella" y así veríamos los puntos de vista sin mediar una pantalla.
      Algún día tenemos que repetir aquel "tapeo" en un bar con Marilí y contigo (aunque no sé si será con motivo de un RA :P ). No lo doy por imposible y estoy segura de que tú tampoco.
      Un beso.

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